¡Nos vamos a casar!... ¿y ahora qué?

Cuando una pareja se decide a casarse, a veces se encuentra perdida en cuanto a que hacer y que pasos dar.
Aunque la boda esté a un año de distancia en el futuro, hay muchas cosas que hacer y si no se tienen claras las prioridades puede que nos encontremos con que no todo lo que habíamos pensado puede hacerse.
Lo primero que hay que buscar y reservar es el lugar de la celebración. Aunque pueda parecer menos importante, los restaurantes y lugares de bodas, se reservan con un año o más de antelación. Y si queremos que nuestra boda se celebre en algún lugar en particular porque nos gusta, o es donde lo hemos soñado, es lo primero que hemos de reservar. Es más importante que el lugar de la ceremonia en sí, pues siempre es más fácil encontrar una iglesia, capilla, juzgado o hacer que el alcalde nos case en el propio lugar del banquete que al revés.
Piensa que en la iglesia/juzgado vas a pasar entre 15 minutos a una hora. Pero en el lugar del banquete vas a pasar horas junto a tus invitados.
En toda lista de prioridades, el segundo siempre será el fotógrafo o videógrafo que va a inmortalizar tu boda. Piensa que un buen profesional reserva fechas con al menos un año de antelación a la fecha de la boda. Y aunque hay muchos y de muchos presupuestos, los profesionales que pueden garantizar el éxito de tu boda están bastante solicitados y si te demoras puede que no tenga disponibilidad para tu fecha y tengas que conformarte con otro que no sea tu primera elección. Ellos se dedican en cuerpo y mente a tu boda y sólo harán una boda por día.
Junto a ellos, es importante que reserves quien se va a encargar de tu belleza en un día tan señalado, hablamos principalmente de maquilladora y peluquera. Aunque aquí también entraría uñas, cuidado de la piel y cualquier tratamiento para estar radiante en tu día.
Después de tener cerrados estos temas, que ya te darán mucha tranquilidad, podrás dedicarte al resto de detalles de tu boda: anillos, vestido, decoración, invitaciones, viajes de novio y organización de invitados.
El resto de detalles raramente tienen una fecha de disponibilidad y no necesitas hacerlo con tanto tiempo de antelación.
Es bueno tener estas cosas en cuenta para asegurarnos de que en nuestra boda esté quienes realmente queremos que estén, y no tengamos que conformarnos con segundas opciones.